Nuevo León, México – En un acto solemne realizado en la Explanada de los Héroes, Nuevo León conmemoró el Día Nacional de Protección Civil el pasado 19 de septiembre. Este evento se realiza anualmente en memoria de las víctimas mortales del devastador terremoto de 1985 en la Ciudad de México, que marcó un punto de inflexión en la conciencia de prevención y protección civil en México.
El izamiento de la bandera mexicana a media asta fue el acto central de la ceremonia, un gesto de duelo en honor a las víctimas del terremoto. El evento contó con la participación de la banda de guerra del 16 Batallón de Infantería de la Séptima Zona Militar, que indujo al minuto de silencio en memoria de aquellos que perdieron la vida en 1985.
Erik Cavazos Cavazos, quien lidera la corporación de Protección Civil en Nuevo León, expresó su agradecimiento al gobernador Samuel García y al secretario general de gobierno, Javier Navarro, por el apoyo brindado a la institución. Durante la actual administración, Protección Civil ha recibido un mayor equipamiento y ha fortalecido su personal con capacitación especializada.
Cavazos Cavazos enfatizó la importancia de la preparación y la profesionalización de su equipo para garantizar la seguridad de la ciudadanía. La preparación de brigadas es fundamental en su labor y afirmó que planean establecer dos bases más, una en la zona citrícola y otra en la zona norte de la entidad.
En cuanto a los simulacros realizados a nivel nacional durante este día de prevención, Cavazos informó que más de 225 mil neoloneses participaron en ellos. Aunque Nuevo León no se encuentra en una zona sísmica, el estado se ha preparado para cualquier eventualidad y continúa capacitando a las brigadas de respuesta.
El líder de Protección Civil recomendó a la ciudadanía mantener la calma en situaciones de emergencia, buscar las salidas de evacuación y no correr, medidas cruciales para la seguridad en caso de un siniestro.
El Día Nacional de Protección Civil es una oportunidad para recordar la importancia de la prevención y la preparación ante situaciones de desastre. A través de simulacros y eventos conmemorativos como este, se busca fomentar una cultura de prevención que pueda salvar vidas en el futuro.